Una veintena de operarios dejaron impoluta la localidad tras la celebración de la Romería

Tras una Semana Santa y una Romería en honor a la Virgen de Piedraescrita realmente intensas, una veintena de operarios municipales trabajaron durante la semana del 11 de abril en la limpieza de calles, recinto ferial y entorno de la ermita para recuperar la normalidad en la localidad.

Tras el intenso día de romería, Campanario se centró en recuperar poco a poco la normalidad. Desde la Concejalía de Obras Públicas y Servicios comenzaron a trabajar en lo que toca después de la gran fiesta: la limpieza de los diferentes espacios en que se celebra esta jornada especial para todos los campanarienses.

Unos trabajos que consisten en la limpieza del entorno de la Ermita de la Virgen, de las calles del municipio, de la recogida de tierra (puesto que los días previos las calles se llenan de tierra para que los caballos no resbalen), así como del recinto ferial, «con el objetivo de que en el menor tiempo posible Campanario vuelva a lucir de la mejor manera», como indican desde la concejalía.

Unas labores de limpieza que también son un reflejo de todo lo que vivió la localidad durante esos días anteriores. Y es que el Lunes de Pascua Campanario, y en concreto la Romería de Piedraescrita, se convirtió en referente regional. Prueba de ello es la gran cobertura mediática que tuvo, ya que buena parta de los medios de comunicación de la provincia y de la región dieron cuenta de esta celebración que congregó en la población a miles de ciudadanos, tanto de Campanario como de municipios de alrededor, contando además con los emigrantes que decidieron, un año más, alargar sus vacaciones de Semana Santa para disfrutar de una Romería incomparable.

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