La concentración de coches clásicos reúne a más de 90 participantes

Más de 90 coches se han inscrito y han participado hoy en la IV Concentración de Coches Clásicos de Campanario, organizada por el Automóvil Club Campanario.

El evento ha permitido a los inscritos recorrer las localidades de Orellana y Campanario, gracias a la colaboración de sus Ayuntamientos, y disfrutar de un día de convivencia para todos los amantes del mundo del motor.

Según Abel Fernández, presidente del Automóvil Club Campanario, cada edición nos esforzamos por ofrecer más, ya que, año tras año crece la aceptación entre inscritos y aficionados para disfrutar de estos vehículos de más de 25 años y de gran cilindrada y potencia.. Añade que este evento supone el fin de una temporada en la que hemos vuelto a organizar el Rally de Campanario, el cual se consolida en el calendario extremeño y sigue abriéndose a otros tan importantes como el madrileño.

La base se ha centralizado, como en años anteriores, en la caseta municipal, donde se han realizado las inscripciones y los participantes han podido degustar un desayuno.

Hasta la explanada de la caseta se han desplazado numerosos curiosos y aficionados, que han podido contemplar de cerca las joyas sobre ruedas que han visitado hoy Campanario.

Entre los vehículos concentrados, se han dado cito gran variedad de inolvidables modelos, como los Seat 600, 850 o 1500, los Citroën 2 Caballos y Dyane 6, los Mini, los Simca 1000, los Volkswagen Escarabajo o los Renault 5, 7 y 12. También pudieron verse varios modelos de Mercedes, algún 'lujoso' descapotable y hasta un impresionante Lincoln, propiedad de Antonio Pavo.

Entre los clásicos no faltaron vehículos a dos ruedas, destacando un sidecar en el que se montaron varios de los asistentes.

Estos vinieron de diversas localidades de la comarca, como Villanueva de la Serena, Don Benito, Talarrubias, Quintana de la Serena, Zalamea..., aunque algunos otros de fuera, como Madrid o Ciudad Real.

Pasadas las once y media comenzó la ruta hasta llegar a Orellana, donde tuvo lugar un aperitivo en común.

Nuevamente se continuó el desfile por las calles de Orellana, finalizando a la hora de comer en Campanario, donde los inscritos han podido disfrutar de unas migas extremeñas. Para finalizar se ha realizado una fiesta con sorteo de premios, todo esto animado con la Charanga Los Despistaos de Campanario.