Recaudan cientos de tapones en Campanario para la causa del pequeño Iker

Campanario volvió a dar muestra de su carácter solidario, volcándose el pasado sábado 7 de noviembre con la causa solidaria 'Por la sonrisa de Iker: ¡Todos a una!', gracias a la iniciativa llevada a cabo por la Asociación Deportiva La Vereda de Campanario.

Iker es un bebé de 10 meses con una enfermedad rara, cuya familia es natural de Alcollarín. En concreto, Iker padece displasia caudal, una enfermedad que provoca malformaciones en órganos y huesos, que en su caso le ha provocado, entre otras, la ausencia de media columna vertebral, médula espinal y coxis prácticamente inexistente.

Como explica su madre, Macarena Fernández, a día de hoy no hay posibilidad de que Iker pueda andar y para que se pueda sentar necesita el uso de corsés especiales que se renuevan según el crecimiento del pequeño, aproximadamente cada dos meses. Estos corsés impiden que se dañen órganos internos provocando hemorragias.

Es por ello, por lo que La Vereda solicitó que, con motivo de su presencia con un taller en La mañana más joven, los vecinos aportaran tapones solidarios, que son muy apetecibles para las empresas de reciclaje, que pagan cierto precio por cada cantidad de estos tapones.

La respuesta del pueblo de Campanario fue espectacular, con cientos de bolsas llenas de tapones recaudados, que se llevaron en la tarde del pasado jueves hasta Villanueva de la Serena, donde la familia de Iker mostró su agradecimiento al presidente de La Vereda, Tomás Pajuelo, en representación de todos los campanarienses.