Las mujeres de Campanario han confeccionado ya casi mil batas sanitarias

El Ayuntamiento de Campanario ha entregado esta mañana al Servicio Extremeño de Salud (SES) una tercera remesa de batas sanitarias elaboradas por voluntarias costureras de la localidad.

En total han sido 330 nuevas unidades, con lo que sumadas a las ya entregadas en los días anteriores, elevan a un total de 930 las batas sanitarias facilitadas a personal sanitario para que puedan ser utilizadas en la Unidad de Cuidados Intensivos.

Y es que la solidaridad del pueblo de Campanario no tiene límites cuando se trata de ayudar ante las adversidades. Por eso, tras recibir un llamamiento por parte del Ayuntamiento para la confección de batas sanitarias, cientos de mujres se mostraron dispuestas a ello. Desde hace unas semanas las máquinas de coser no paran para seguir confeccionando batas sanitarias para los profesionales sanitarios de Extremadura en la lucha contra el coronavirus.

Una labor que está siendo llevada a cabo de forma voluntaria por una treintena de mujeres, ya que algunas de las que se han ofrecido, finalmente no contaban con los medios de confección adecuados para ello «pero si no hubiéramos sido más de cien», cuenta María Maldonado, concejal encargada de la coordinación de las voluntarias, a quienes agradece «el trabajo, el esfuerzo y la solidaridad en favor de la salud de todos».

Y precisamente, entusiasmo y satisfacción es lo que sienten voluntarias como Maribel, Ana o Isabel, que son solo una muestra de todas ellas, donde «somos como una piña y si alguna tiene algún problema otra le da solución», aseguran. Incluso, algunas de las que vieron que no podrían coser las batas por falta de máquinas adecuadas, ya que era un tipo de tela especial, han querido echar una mano «en lo que fuera».

La iniciativa está impulsada y amparada por el Servicio Extremeño de Salud (SES), que repartió el material homologado al consistorio campanariense, así como a otros consistorios de la región, para que lo distribuyan por los domicilios de las mujeres costureras. Cabe recordar que este tipo de batas sanitarias de doble cosido, ya que deben ser muy herméticas, según acentuó el coordinador del Operativo Alpha, Jaime Ruíz, «son muy importantes, ya que se pueden lavar y utilizar para muchas ocasiones».

La tarea comenzó con el visionado de videos en los que se explicaba cómo debían ser las batas. Y tras recibir a domicilio el material cortado, como son el cuerpo, las mangas o las tirillas de ataderos, las voluntarias comenzaron la actividad. El material ya venía higienizado y era repartido por el personal de la Universidad Popular.

Y aunque el comienzo no fue sencillo, ya que se trataba de una tela especial, después todo se ha solucionado y «estamos muy ilusionadas por contribuir a esta labor, en la que insistimos en que no hay nadie más que nadie y todas vamos a una», aseguran estas tres costureras en representación del resto.

Igualmente, dicen haber recibido un audio de agradecimiento del coordinador del operativo en el SES «por la buena labor que se está desempeñando en Campanario», ha dicho.