Toñi J. Sánchez Díaz revoluciona el mundo de la educación con su libro 'ChatGPT: Educando con la IA'

En una etapa en que la Inteligencia Artificial se abre paso con fuerza, la campanariense Antonia Jesús Sánchez Díaz presenta su libro 'ChatGPT: Educando con la Inteligencia Artificial'.

Toñi, como la conocen todos, es profesora de Educación Infantil en el colegio Nuestra Señora de Piedraescrita, aunque este año desarrollará su labor docente en el Centro de Profesores y Recursos de Castuera.

Define su libro como una guía práctica para los docentes que quieren avanzar e innovar en la educación utilizando las tecnologías, integrando poco a poco la inteligencia artificial en las aulas.

«Chat GPT pertenece al campo de la informática que genera respuestas informativas a las peticiones de una persona tal como ésta se la solicite, con estructuras muy sencillas: definir el objetivo, dar un contexto y pedir en qué formato necesitas la respuesta», señala la docente, y añade: «Es mucho más que Google, puesto que realiza resúmenes y responde en formatos diferentes, el que necesites».

Su interés por este tema empezó a través de su interés en las nuevas tecnologías, se propuso crear una web sobre temas educativos y, a partir de ahí, comenzó un curso online. Entre las tareas a desarrollar tenían que interactuar con ChatGPT, que por entonces había sido lanzado recientemente, y descubrió su fascinación en la rapidez de respuesta, formatos ofrecidos y un tipo de comunicación fluida como si fuera una persona, por lo que decidió trasladar su uso a la educación, ya que hasta entonces sólo se utilizaba con una finalidad de marketing.

El libro está dirigido a profesores, alumnos, padres,… Por un lado, los docentes van a encontrar en él estrategias para incorporarlas a sus métodos de enseñanza, mientras que los alumnos van a comprobar cómo esta tecnología puede mejorar su aprendizaje. Por su parte, los padres pueden entender los beneficios de esta herramienta para el uso de sus hijos. Además, la autora aclara que las personas interesadas en las tecnologías o educación pueden encontrar un contenido valioso en sus páginas.

Toñi defiende que las ventajas de la inteligencia artificial en la educación de hoy en día son numerosas. Entre ellas destaca un aprendizaje personalizado, ya que permite adecuar los materiales y la dificultad de las tareas a cada niño, y también mejora la accesibilidad, puesto que existen herramientas de texto a voz para el acceso al contenido educativo para alumnos que tengan discapacidades o se encuentren con la barrera del idioma. También agradece su inmediatez, ya que está disponible las 24 horas del día los 365 días del año, sólo con tener acceso a Internet.

En lo que respecta a su profesión, la enseñanza, señala que «el ChatGPT permite una automatización de tareas para los profesores, como la gestión de datos, liberando al docente de tiempo para que pueda emplearlo en acompañar en el aprendizaje al alumno, que es lo fundamental».

En su uso por parte de los alumnos, hace hincapié en que es un 'feedback' inmediato, una interacción, por lo que los alumnos pueden corregir errores y avanzar más rápido.

Sin embargo, también tiene contras que hay que poner encima de la mesa, ya que reconoce que se trata de una herramienta que no es perfecta y de la que aún hace falta desarrollar diferentes aspectos.

Entre esos inconvenientes se encuentran algunos problemas de privacidad de los alumnos, y el hecho de que podría suponer una brecha educativa para los alumnos que no tengan acceso a Internet, además de provocar en muchos una dependencia tecnológica, reduciendo la capacidad para pensar y resolver problemas por sí mismos. Además, confirma que «existe la posibilidad de respuestas engañosas, puesto que cuando ChatGPT no sabe una respuesta no lo admite, sino que intenta dar una respuesta que parece real y no lo es». Por ello, admite la necesidad de un uso responsable y correcto de esta herramienta.

Precisamente, hay una cuestión encima de la mesa: el hecho de que el alumno utilice el Chat GPT para realizar las tareas y la necesidad de reflexionar hasta qué punto es ventajoso o perjudicial para la adquisición de conocimientos, si tienen algo que hace el trabajo por ellos. Al ser preguntada por ello, afirma que es consciente de que todo tiene sus pros y sus contras, pero está convencida de que «es indudable el potencial que tiene esta herramienta para mejorar las habilidades de los alumnos, aunque depende mucho de cómo la utilice el docente y del tipo de evaluación que realicen».

Por tanto, lo importante es utilizarlo como una herramienta complementaria, no como una herramienta que haga todo el trabajo. Está 100% segura de que los avances caminan hacia la mejora y aminoración de sus limitaciones.

Una de las principales ventajas es que no se necesitan conocimientos previos técnicos ni informáticos, «ya que se trata más bien de una conversación, iniciar e interactuar de la forma más sencilla», recalca. Si bien es cierto que ChatGPT destaca por su sencillez, matiza que a la hora de llevarlo al aula e implementarlo en ella sí que se necesitaría una formación por parte de los docentes, hacia el avance en la educación.

El libro escrito por la campanariense se ha convertido en una guía práctica de referencia para que el docente pueda sacar el máximo provecho de una herramienta que ha llegado para quedarse.

Todo apunta a que habrá que hacerse a la Inteligencia Artificial del mismo modo que en su día nos hicimos a Internet. Por aquel entonces, su funcionamiento se nos hacía un mundo, pero con el paso de los años se ha descubierto que al final nos facilita la vida. Como ella misma dice: «Estamos en medio de una transformación».

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