Una foto de los frutales en flor tomada por Javier Simón se hace viral

Entre el blanco y el fucsia se alojan hasta una decena de tonalidades que van gradualmente desde el color más pulcro hasta el rosa más encendido. Esta variedad cromática forma un manto multicolor sobre los campos de las Vegas Altas del Guadiana que estos días luce en todo su esplendor.

Miles de millones de flores son la antesala de lo que en unos meses serán ciruelas, melocotones, nectarinas, paraguayos, peras o albaricoques, que antes ofrecen un auténtico deleite visual que comienza cada año a mediados de febrero y se esfuma en las primeras semanas de marzo.

Son cerca de 20.000 hectáreas las que se concentran a lo largo del cordel de la carretera N-430 ramificándose por los pueblos de la comarca. Un espectáculo que a muchos hace comparar con la floración en el Valle del Jerte, un poco más tardía y con una única gama cromática.

Escaparate

Un paisaje efímero pero digno de admirar. Por eso son muchos los que estos días aprovechan para inmortalizar el lienzo de colores con paseos por el campo. Es lo que hace cada año Javier Simón, un fotógrafo de Campanario que llevaba tiempo esperando a hacer la foto perfecta.

Concretamente, se ha hecho viral una aérea tomada en una finca próxima a Villar de Rena, donde se aprecian a la perfección los parches de colores. Fue tomada hace una semana en una salida con un grupo de fotógrafos por las Vegas Altas. «Ya sabía que ese lugar era perfecto para la foto y andaba detrás de la instantánea desde hace tiempo», comenta Simón.

Aunque él se dedica a la fotografía de naturaleza y no tanto de eventos, reconoce que estos frutales ofrecen una alternativa muy atractiva para hacer fotos de comuniones o de bodas, por ejemplo.