Isi Tena: «Esto más que un equipo es una familia y voy con ellos hasta la muerte»

En un partido de fútbol, y más si es decisivo, de todos los jugadores, parece que el único que no puede permitirse ni un solo fallo es el portero.

Una responsabilidad que recae bajo palos y que durante 90 minutos vive en tensión con la carga de tener que dar la talla cuando llegue su momento.

Cuando Isi Tena ve acercarse el balón a su portería entra en modo concentración y no permite que le tiemble el pulso para ser infranqueable. Y en el C.F. Campanario, desde hace tres años, lo viene demostrando. Pero donde sobre todo ha dado la talla este portero rojillo ha sido en la primera eliminatoria en la fase de ascenso a Tercera División el pasado sábado donde, junto a sus compañeros, logró que el rival no anotara por encima de lo permitido para que el Campa pasara a la ronda final.

Ahora tiene por delante un reto aún más grande. Hacer que su equipo sea de Tercera. Para eso solo faltan unas horas, que las pasa «con calma, relajado y en familia que es como mejor puede estar uno tranquilo», confiesa.

No lo tiene complicado para que todo salga como está planeado «porque veo al equipo muy ilusionado con esta oportunidad. Ha sido un año intenso y donde ha habido mucho sacrificio para estar donde estamos, por lo que, dentro de lo atípico de la temporada, tengo plena confianza en todos mis compañeros y que este tenía que ser el año para hacer historia en Campanario, por el equipo, por la afición y por el pueblo», se sincera.

Este guardameta asegura que el haber jugado el año pasado una fase de ascenso les está dando más confianza y tranquilidad para afrontar este nuevo reto «en el que confío ciegamente en mi equipo y con ellos voy hasta el final, hasta la muerte».

Y es que «esto más que un equipo es una familia», ha reconocido Isi Tena, puesto que son ya tres años juntos en Campanario «y hemos conseguido mucho y tenemos que rematar este año sea como sea».

Pero su mayor agradecimiento va para quienes son incondicionales, en las buenas y en las malas. «A la afición que no podrá estar en las gradas con nosotros les digo que los sentiremos como uno más y como si estuvieran ahí», asegura, tras haber recibido en las últimas semanas, y sobre todo en estos días previos al desenlace del ascenso, numerosas muestras de cariño.